Finalmente todo el embeleco de la novela del video de “Alvaro Lemmon“ el hombre caimán que al parecer tiene un final feliz para el humorista porque le salió trabajo en los Carnavales de Barranquilla y dice vendió diez millones de pesos en mochilas, de acuerdo con sus propios comunicados, tiene emocionados, a algunos de sus compañeros de “Sábados Felices“, quienes jamás imaginaron recuperarían la platica que le prestaron cuando asistía al set del programa y los cogía directo y sin anestesia para que lo respaldarán en los préstamos que iba a solicitar al fondo y luego les pagaría. Cuando ellos hablaron de reunirse y emitir un comunicado explicando su posición les llovieron rayos, truenos y centellas por la poca o, ninguna solidaridad con su ex-compañero. Ellos si saben secretos internos de la convivencia en el programa y porque realmente salió Alvaro del programa, aunque no los dicen públicamente para no atizar más la hoguera. Pero es que nadie sabe como eran las cosas al interior del programa cuando laboraban todos y cómo les caía hasta compañeros que nada que ver con el programa solicitándoles plata prestada, Hasta en dólares debe a una compañera. Por eso están esperanzados, porque comenzaron a sacar cuentas y confían en que en ésta etapa de prosperidad que comienza para Lemmon se acuerde de las deudas con ellos y las cancele. Recuperar esa platica les cae como anillo al dedo después de ésta larga pandemia lo necesitan, aunque no se quejen. Los humoristas de la escuela de “Sábados felices“ si saben al dedillo como fueron las cosas con “El hombre caimán“ y por eso aseguran lo que comentan. Mejor dicho que no los haga hablar más porque la imagen de él va a sufrir y lo quieren dejar ahí, deseándole todo el éxito del mundo. La lista de acreedores es banstante larga. Están haciendo cola para cobrarle. Como dice el refrán “cada uno habla de acuerdo a como le va en la misa“. Y por lo que se ve ahí lo que hay son damnificados. Hay que refrescarle la memoria a Alvaro.