El mensaje es conmovedor por no decir otra cosa. El propio José lo dice sinceramente, sin adornos, sin filtros ni perendengues está luchando nuevamente contra la depresión que se cierne sobre él últimamente. Ya había vivido un período de depresión durante unos meses que lo obligó a refugiarse en su casa de Rionegro en Antioquia. Después de un largo tratamiento logro salir airoso del mismo y continuar con todos los éxitos de su música en el mundo. Sin embargo ahora esta entrando otra vez en el mismo circulo de la enfermedad y él está alerta, lo suficiente para reconocerlo y advertirle a todos sus seguidores lo delicado de ésta dolencia que no respeta edad, sexo, condiciones físicas, mucho menos status sociales. Es cuando uno se pregunta ¿todo el triunfo, la estela de ícono de la música mundial, el ser el preferido de millones de fanáticos en el mundo, el dinero, para que sirven, cuando no se tiene la salud suficiente para disfrutarlos? Una buena reflexión para J, Balwin en éstos momentos de cuarentena selectiva, víctimas del Corona virus, dónde no hay paliativo para comprar al precio que sea. Ojalá José tenga una pronta recuperación de los síntomas depresivos y pueda continuar su vida como el lo desee.